sábado, 11 de diciembre de 2010

Amanecerás una mañana soleada,
sumergido en un hermoso "pensa-siento"
imaginando cada paso a dar,
esperando el buen momento para avanzar.
Rumbo... ¡hasta que se acabe el mar! (como le decías al aitona de niño).

Vuelas y vuelas
entre corazón y corazón...
no más cansancio entre tus huesos,
taladrados de amores y honores,
una luz de Amor te colma y
ríes con nosotros/as
a carcajadas... al viento, al viento.

No hay comentarios:

Publicar un comentario